Después de ganar el campeonato de la NBA la temporada pasada al derrotar a los Boston Celtics en la final, los Dallas Mavericks decidieron mantener su impulso ganador. En verano, el equipo dirigido por Luka Doncic dio un paso audaz al fichar a Klay Thompson, que puso fin a su dilatada carrera en los Golden State Warriors junto a Stephen Curry.
La medida fue crucial para Thompson, quien a los 34 años buscaba revivir su carrera. Su debut con los Mavericks fue fundamental. En el primer partido de la temporada, Dallas se enfrentó a los San Antonio Spurs, perdiendo por un marcador de 120-109. Doncic lideró el camino con 28 puntos, mostrando potencial para ser el MVP de la temporada. Thompson también anotó 22 puntos, empatando un récord de la franquicia.
Con seis triples, Thompson empató el récord de más triples anotados por un jugador de Dallas en un primer partido de temporada, una marca establecida por Jason Terry en 2008. La química entre Thompson y Doncic ya es evidente, como se ve cuando Doncic celebra el triple de Thompson antes de que entre el balón.
La victoria contra los Spurs fue un comienzo casi perfecto para los Mavericks. El equipo, dirigido por Jason Kidd, se prepara ahora para un duro enfrentamiento contra los Phoenix Suns, que cuentan con estrellas como Kevin Durant, Devin Booker y Bradley Beal. Este juego será una prueba importante para Dallas en su camino hacia dominar la Conferencia Oeste.
Con una combinación de experiencia y talento joven, los Mavericks están bien posicionados para competir al más alto nivel esta temporada. La incorporación de Thompson no sólo suma un tirador confiable, sino que también aporta creatividad y experiencia en playoffs, cualidades esenciales en la NBA.
Promete ser una temporada emocionante para los fanáticos de Dallas, quienes esperan que el dúo Doncic-Thompson los lleve a nuevas alturas. Con un comienzo tan prometedor, el equipo tiene todas las herramientas para aspirar al título y corregir los errores del pasado. La anticipación aumenta a medida que los Mavericks continúan mostrando su potencial en la cancha, dejando en claro que están listos para desafiar a cualquier oponente por el campeonato.